El mercado de fichajes cada día comienza a tomar más relevancia. Cerca de concluir la primera mitad de la temporada, los diferentes equipos del fútbol europeo comienzan a preparar sus finanzas y estrategias deportivas para reforzarse de cara a la parte decisiva del año futbolístico. Tras un mal semestre y con la llegada de Xavi Hernández, el FC Barcelona es uno de los equipos que más necesita de la ventana invernal para apuntalar y mejorar su plantel no sólo para el final de esta temporada, sino también para las siguientes.
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Ante la precaria situación económica del conjunto blaugrana, la directiva encabezada por Joan Laporta busca jugadores con el contrato próximo a vencer, bien sea para negociar un precio a la baja o para contratarlos como agentes libres. Uno de los nombres que más se ha vinculado al Barcelona en los últimos meses es el de Raheem Sterling, próximo a finalizar su contrato con el Manchester City en 2023 y cada día menos utilizado por Pep Guardiola. Sin embargo, el circo mediático que se ha montado alrededor del posible traspaso del futbolista inglés con el FC Barcelona tiene muy molesto a Pep.
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“No me preguntéis a mi por fichajes, no voy a hablar ni ahora ni hasta el final del mercado. No es mi trabajo y no voy a responder ninguna pregunta al respecto porque no se lo que va a pasar. Mi única prioridad, y la de Raheem, es preparar bien los partidos”, sentenció un irritado Guardiola en conferencia de prensa previo al encuentro en el que el Manchester City recibirá al Everton.
