Es cuestión de que pasen algunas semanas o tal vez días para que uno de los jugadores históricos en la historia del fútbol mexicano deje el fútbol profesional.
Quizá no destacó como muchos esperaban en la Selección Mexicana y por ese motivo no lo considerarán como jugador histórico, pero el hecho de convertirse hasta el momento en el máximo goleador en la historia de un equipo como las Chivas Rayadas de Guadalajara ha hecho que su nombre se escriba con letras de oro en la Liga Mx.
Omar Bravo salió de Chivas y se convirtió rápidamente en un referente en el ataque del equipo ganándose de inmediato el cariño de la afición.
Después de cumplir su etapa como jugador del rebaño Omar Bravo probó suerte en el fútbol de Europa, jugando para el Deportivo La Coruña en donde no le fue del todo bien al mochiteco, lo que lo obligó a regresar para jugar con los Tigres de la UANL, equipo en donde no pudo anotar ni un sólo gol.
Después de volver a Chivas por una temporada probó suerte en el fútbol de la MLS en donde volvió a reencontrarse con el gol, por lo que la Máquina Celeste de Cruz Azul lo contrató y lo trajo de regreso al fútbol mexicano.
Pero sin duda donde renació como futbolista fue en el equipo rival del rebaño: Los Rojinegros del Atlas.
Omar Bravo llegó ante la furia de los aficionados rojinegros, sin embargo con la entrega y goles el delantero mexicano se ganó el cariño de los rojinegros quienes solamente pudieron disfrutar de sus goles una temporada para después regresar a las Chivas y terminar convirtiéndose en el goleador histórico del rebaño con 132 goles.
Sus últimos momentos como futbolista profesional los vivió en categorías inferiores de la MLS en los Estados Unidos y al no entrar en planes de su último equipo, Phoenix Rising FC, el delantero mexicano estaría a pocos días de anunciar su retiro de las canchas a sus 38 años de edad.