Muchos adoran su trabajo, sin embargo, existen ocasiones en la que trabajar no representa un verdadero placer para quienes esperan un sueldo.
Hay quienes tienen la mala suerte de además de odiar lo que hacen, desarrollan enfermedades por estar en ese lugar.
Ese es el caso de Caitlin Taylor, una mujer que se dedicó a las finanzas tras buscar en Google “cómo hacer la mayor cantidad de dinero”.
Y aunque la paga era buena, el trabajo no era tan fácil como se lo imaginaba. En su ignorancia se hizo banquera de inversión en Londres y no pasaron muchos meses para descubrir que era un lugar tóxico para ella. Lamentablemente el trabajo no se quedaba en la oficina, pues estaba desarrollando una reacción por los niveles de estrés a los que estaba expuesta.
Esto le ocasionó una inflamación en la piel que más tarde fue urticaria y según contó, apenas lograba ver por la gran hinchazón.
Los médicos realizaron muchas pruebas esperando lo peor, inclusive creyeron que podía ser cáncer pero por más que buscaban, no había nada malo. Su horario de trabajo comprendía de las 7 de la mañana hasta las 10 pm, en ocasiones duraba un poco más.
“Primero pude sentir el estrés y la ansiedad arrastrándose. Luego comencé a sentirme muy enferma. El sarpullido en mi cabeza era muy malo. Mi piel estaba muy hinchada y con burbujas, si me pasaba los dedos por el pelo podía sentir grandes ronchas como picaduras de abeja. Me picaban un poco y si los tocaba me dolían. Eran urticaria”.
–Caitlin Taylor
Fue entonces cuando los doctores llegaron a la conclusión sobre su enfermedad, era una fuerte alergia ocasionada por su trabajo, específicamente por el estrés que le producía. Así que tras una dosis grande de antihistamínicos, le recomendaron tener una vida más calmada.
Ella tras tanto sufrir, no lo pensó mucho y abandonó su trabajo. Decidió que era el momento de hacer todo lo contrario a estresarse por lo que tomó sus ahorros y se fue de viaje dos años y medio alrededor del mundo. Si bien llegó con grandes deudas, ahora está tranquila y trabaja con calma para no caer en la misma enfermedad.