Hay cosas que marcan nuestra infancia, cosas y detalles que son tan importantes y significativos que son dignos de recordar toda la vida.
Tal es el caso de Valeria Valentina Riojas Gutiérrez quien a sus seis años, vivió un momento hermoso, cuando después de su graduación del kínder “Evaristo Pérez Arreola” fue a “dar la vuelta a la manzana” en una caravana vehicular y decía adiós con sus manitas a familiares, amigos, vecinos y conocidos abordo del viejo triciclo de su abuelo.
El triciclo, adornado con globos y flores de todos colores que colocaron las mismas maestras, era el segundo de la fila de carros y camionetas y el que, sin duda, más llamó la atención en la colonia del mismo nombre del plantel.
“Imagínese usted mi nietecita en triciclo en medio de tanto vehículo, y algunos verdaderos carrazos, eran como 30”, dijo a “El Universal”, Guadalupe Riojas, abuelito de la niña, sonriente y muy feliz por el hecho que fue todo un acontecimiento y trascendió a la opinión pública gracias a la publicación en redes sociales de una cibernauta.
A través de su cuenta de Facebook, la usuaria Tania Coronel compartió fotos y escribió sobre el lindo detalle que creyó había provenido del padre de la menor.
“No suelo subir este tipo de cosas. Pero hoy fue la excepción. Es realmente hermoso ver que tan lindo y grande puede ser el amor de padre hacia un hijo. Así que, valoren a sus padres y trátenlos con cariño, tal vez no sean perfectos, pero los aman y lo único que desean es que ustedes sean capaces de salir adelante en esta vida y triunfar como hombres y mujeres de bien”.