Locura en Coppenhague.
Luego de un par de descalabros al inicio y llegando al tercer encuentro de fase de grupos prácticamente eliminado, Dinamarca venció 4-1 a Rusia y con ello asegura su lugar en los octavos de final de la Euro 2020. El cuadro dirigido por Kasper Hjulmand finalmente logró reflejar en el resultado del partido su extraordinario nivel colectivo mostrado en los dos anteriores encuentros que perdieron ante las selecciones de Finlandia y Bélgica.
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Con goles de Mikkel Damsgaard (38′), Yussuf Poulsen (59′), Andreas Christensen (79′) y Joakim Maehle (82′), los daneses sellaron su pase a los octavos de final, luego de haber perdido a su líder y el mejor jugador del equipo, Christian Eriksen en la primera jornada de la fase de grupos, producto de un paro cardiorrespiratorio que casi le costó la vida. El gol de Christensen, luego de que Rusia se había acercado en el marcador por vía de una dudoso penal, marcó el inicio de una especial fiesta en Coppenhage.
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Los rusos habían marcado el penal y se acercaban al marcador. En el otro encuentro, el VAR eliminaba un gol de Lukaku por supuesto fuera de juego. El portero ruso Matvéi Yevguénievich Safónov estaba siendo la gran figura del encuentro, sacando hasta tres claras de gol en menos de un minuto. Sin embargo, tras un rebote, Christensen disparó con más fe que lógica, y el balón se incrustó en la portería con violencia. La celebración del festejo fue dedicada al capitán del equipo, Christian Eriksen.
